24/7

Sabemos que llevar un negocio como pareja no es nada sencillo, en nuestro caso ya con varios años viviendo esta situación, hemos pasado de todo. El primer reto que enfrentamos como pareja fue el hecho de hacer frente a la cocina ya que ninguno de los dos estudiamos gastronomía y mucho menos veíamos un hobbie en cocinar, si no una tarea que cubría la mera necesidad de librarnos del hambre, sin embargo, adentrarnos a esta labor nos ha hecho ser mas exigentes con nosotros mismos y nos ha cautivado hasta el punto de comprometernos con lo que hacemos. No fue de la noche a la mañana que dimos con un punto de equilibrio en nuestras vidas como novios/socios, hasta la fecha seguimos afinando detalles.

   En un principio las peleas eran nuestro pan de cada día, ya que era difícil separar nuestra relación del negocio, y las discusiones iban desde una opinión diferente, hasta arrojar lo que se tenga a mano en el piso y discutir toda una noche, pero, no es sino un peldaño en esta escalera de situaciones, donde hemos aprendido que dialogando se puede llegar a muchas partes “lo sabemos”. Nuestra relación ha madurado y los malos entendidos cada vez son menos, y la paz abunda la mayor parte del tiempo, eso si, cuando nos escuchamos el uno al otro. Una de la soluciones que tomamos fue descansar dos días a la semana pues el estrés diario del negocio choca con nuestras capacidades y energía. Somos una pareja que se ve 24 horas al día, los siete días de la semana, poco sano, si se planea extrañar a tu pareja, aunque excelente si amas de verdad a pesar de todo. Las expectativas para ambos es muy diferente a largo plazo, pero, el fin último es continuar juntos “pero no revueltos” como ahora. Llevar nuestro comedor codo a codo valorando y disfrutando nuestro momento, a pesar de que no sabemos que pasará, ya que una relación como la nuestra tambalea tanto que es difícil mantenerse agarrados por mucho tiempo. Este pequeño comedor que consideramos ya un hijo nos ha hecho llevar nuestra relación a un nivel de prueba, que nos ha exigido mucho sacrifico, aprendizaje constante y amor incondicional.